Quiso el sorteo castigar al Atlético de Madrid por su descaro en una competición que durante demasiado tiempo le fue ajena y le emparejó con el Barça, uno de los equipos mas potentes del mundo que hace que el pase a semifinales se antoje extremadamente complicado. Además, al ser también el rival español viste de cotidianidad algo que no lo es. De hecho la última vez que el conjunto del Manzanares disputó unos cuartos de Champions esta canción era el número uno en España. A muchos ni les sonará. Normal, la timorata dirección de la familia Gil ha convertido en extraordinario algo que no tiene porque serlo.
Volviendo al partido, Simeone ha convocado a todos sus jugadores disponibles (se han quedado en Madrid Manquillo por lesión y Raúl García por sanción), pero no se esperan sorpresas… salvo que Diego Costa finalmente no pueda jugar (no terminó el entrenamiento previo) y el Cholo deba recomponer su equipo. Si el hispano brasileño juega, que seguramente lo haga, las únicas dudas son quienes serán los acompañantes del delantero y de Gabi. Villa o Diego en ataque y Mario o Tiago en la contención son los candidatos.
El técnico colchonero ha repetido en innumerable veces que el primer partido es el más importante en una eliminatoria, por lo que cabe esperar que tenga meticulosamente analizado al rival y que en su cabeza haya diseñado, junto al Mono Burgos, un plan para salir victorioso del Camp Nou. No será nada fácil, de hecho el Atleti no lo logra desde hace ocho años, cuando el Niño Torres aún vestía de rojiblanco.
Y es que enfrente estará el todopoderoso Fútbol Club Barcelona, elevado a las alturas por la figura de Guardiola y sus títulos. Él ya no está, pero permanece su legado que, primero Tito y ahora el Tata, tratan de conservar y acomodar a las nuevas situaciones. El actual técnico barcelonista ha sido muy criticado desde que llegó, pero resultado descabellado hablar de crísis cuando un equipo ha ganado un título (la Supercopa de España), está en la final de la Copa de Rey y pelea por lograr otros dos. Benditas crisis. Lo único cierto es que el Barça es sólido defensivamente, peligroso en ataque y encima ha recuperado a Messi. Por el contrario ha perdido a Valdés, el mayor culpable de que el Atleti no lograse la Supercopa en agosto.
En el Camp Nou está la clave de la eliminatoria, si el Cholo desactiva al Barça, el equipo colchonero estará más cerca de su sueño, si no lo logra, el papel del Atleti en esta Champions es muy meritorio, pero llegados a este punto… Hay que asaltar el Camp Nou