La ligera ventaja obtenida en el duelo de ida convierte el enfrentamiento de San Mamés en uno de esos partidos duros, apasionantes para los que nada se juegan en el envite, pero cardíaco para quienes llevan los colores de uno u otro. Mientras el Atlético de Madrid confía en su estilo para tomar la Catedral, algo que no ha hecho todavía nadie, en Bilbao, por su parte, esperan voltear la eliminatoria y dejar en la cuneta al vigente campeón. Y en las semifinales espera el Madrid.
Ni la dureza del calendario copero, ni la carga de partidos, ni el bajón de juego del Atleti sirve de escusa para Simeone a la hora de afrontar en duelo. Ni siquiera las bajas de Arda, Tiago y Óliver merman su ambición. El técnico argentino ha convocado a todos sus jugadores disponibles sabedor de que deberá modificar su once de gala para resistir en una plaza complicada. Será difícil, sí, pero es posible pasar. Incluso ganar allí donde no lo ha hecho nadie aún. Y es que el cuadro del Cholo está acostumbrado a pelear contra viento y marea y de paso ir acumulando récords y honores estadísticos. Ser el primero en vencer en San Mamés Barria sería uno de ellos. Pero hay que ganar. Y no será fácil.
El Athletic de Bilbao ha recuperado a Muniaín, que no jugó en la ida, tratará de aprovechar la inercia goleadora en la que vive instalado (viene de hacerle cinco goles al Osasuna en el Sadar) y el aliento de su público. Aún con un fondo sin terminar, el nuevo San Mamés no ha perdido un ápice de la excepionalidad del viejo campo. El Atlético de Madrid deberá abstraerse del ambiente, pero no le será fácil ya que desde que acabó el partido de ida, en algunos altares se ha tratado de enrarecer el ambiente.
Un ambiente ya embravecido por diversos y notorios antecedentes deportivos y extra-deportivos. En lo que se refiere a lo que pasa dentro del césped, en Bilbao aún escuece aquella final del 9 de mayo de 2012. Ni siquiera la victoria liguera la pasada temporada en el ya derruido San Mamés sirvió de atenuante para los bilbaínos. Los leones necesitan más. No en vano el Atleti ha sido la bestia negra del Athletic en las eliminatorias coperas desde los años setenta. Sin embargo, en los catorce duelos coperos disputados en San Mamés el Atleti sólo venció en dos. En el resto empató (3) y perdió (9). Antecedentes para todos los gustos. Si los colchoneros quieren seguir adelante en esta Copa deben sobrevivir a San Mamés. Toca sufrir.